¡Hola disfrutones!
Seguimos nuestra ruta por Francia, parando esta vez en BROUAGE y POITIERS, dando un largo paseo por su casco medieval, ¡qué bonito!
Si estáis planeando una ruta por Francia, no os perdáis nuestros posts sobre el País Vasco-francés, Biarritz, Arcachon, Hossegor y otros que subiremos más adelante. Aquí tenéis todos los videos por si queréis hacer un «maratón de videos de Viajando a Nuestro Aire por Francia»…
Poitiers es parada obligada para l@s disfrutones que os guste el arte románico. Es una ciudad con más de 2.000 años de historia. En la época medieval fue uno de los principados más importantes de Francia, y se nota en cada casa, en cada esquina, en cada placita…
Que ver en Brouage
Pero antes de llegar a Poitiers paramos en Brouage, la primera ciudadela defensiva que se construyó en Francia. La diseñó el mismísimo Cardenal Richelieu para tenerla como ciudad-cuartel durante las luchas entre católicos y hugonotes. Se ha mantenido en perfecto estado, es una maravilla para pasear y aprender sobre la historia de Francia.
Entrad a Brouage por la puerta de la guardia, donde veréis «grafitis del siglo XVI»… básicamente los soldados que hacían guardia se entretenían rascando la pared y pintando sus nombres y objetos de la época. Se ver perfectamente bien una espada, como veréis en el video.
Las murallas están perfectas para hacer el paseo de ronda y disfrutar de las vistas en alto del pueblo, del foso, de las fortificaciones… El paseo termina en una gran plaza, llamada la Isleta del Mercado. Allí se celebraba en el siglo XIX el mercado de carne y cereales, además de tener los edificios donde dormían los mercaderes y donde tenían el arsenal.
Brouage también es una maravilla para disfrutar de sus coquetas cafeterías y sus tiendecitas de artesanía. Nos habría encantado dormir allí, pero tiene muy poca oferta hotelera y toda reservada semanas antes.
Otra cosilla que nos enamoró de Brouage son sus contraventanas de madera, super bien cuidadas y pintadas de colores. ¡Nos hartamos a hacerles fotos!
Por fin llegamos a Poitiers.
Primera sorpresa, nada más dejar el coche en el parking de la Iglesia de Notre Dame, fue ver su grandiosa plaza. Todas las casas con esa arquitectura típica tan bonita: dos o tres pisos, puertas y contraventanas de madera, esos entramados de madera… ummm, ¡esta villa nos va a gustar!
Nuestro Airbnb estaba en una de las calles principales, la Grand Rue. No tiene pérdida, ya que va desde la plaza mayor en la parte alta, hasta el río, en la parte baja de la ciudad. Si queréis saber dónde dormimos, mandadnos un mail a viajandoanuestroaire@gmail.com y os daremos el contacto, nos gustó mucho.
La Grand Rue de Poitiers es una maravilla también, con esas casas medievales, tienditas cucas, cafeterías… entramos en una tienda de paraguas hechos a mano que eran una pasada, eso sí, caros caros…
Merece la pena bajar la calle hasta el río. Se trata del río Clain, no es muy grande pero le da un toque muy romántico a la ciudad.
Desde allí visitamos la Iglesia de Santa Radegunda. Es una preciosa iglesia gótica, con las columnas policromadas y donde asistimos al ensayo de un coro de niños de un colegio de Northampton. Fue espectacular, como podréis escuchar en el video.
También vimos la Catedral de Poitiers, un perfecto gótico con sus torres que parece que las terminaron de construir ayer…
Subimos otra vez a la parte alta, al otro extremo de la ciudad. En la Plaza de La Libertad es donde colocaban la guillotina y es una de las plazas más antiguas de la villa. Como curiosidad, allí veréis una estatua de la libertad en pequeño, clavadita a la de Nueva York.
Desde allí y yendo hacia la plaza mayor, no os perdáis la calle Carnicerías, para nuestro gusto, una de las más bonitas de Poitiers y con las casas más antiguas. Nos recordaban esas casas a las de Mogarraz y la Sierra de Francia. De hecho Sandra os cuenta en el video de Sierra de Francia el motivo de este nombre…
Nos tomamos una cervecita enfrente del Palacio de Justicia mientras leíamos sobre la historia de este precioso edificio. Fue el Palacio de los Condes de Poitiers y sobre todo destaca su salón de baile, llamado muy románticamente, «El Salón de los Pasos Perdidos»…
En el video de Poitiers Sandra os contará la historia de la leyenda de Leonor de Aquitania. Fue reina de Francia e Inglaterra en diferentes momentos, madre del mítico Ricardo Corazón de Leon… a ver si os gusta!
Por fin llegamos a la iglesia que más nos apetecía ver: La Iglesia de Notre Dame de Poitiers. Se trata de uno de los mejores ejemplos de Románico en Europa y sin duda, uno de los pórticos mejor conservados del mundo. El pórtico es para llevar una silla plegable y analizar cada centímetro.
Pero cuando entras, ay cuando entras… columnas policromadas con motivos geométricos, un ábside con un pantocrator espectacular… nos dejó realmente anonadados, sin duda la Iglesia de Notre Dame es motivo suficiente para ir una vez en la vida a Poitiers.
Ya, después de tanta cultura e historia, era el momento de cultivar el carnal apetito… así que fuimos a uno de los restaurantes mejor recomendados de Poitiers: Les Archives.
Presume de estar construido sobre lo que fue una capilla de una abadía del siglo XVI. El salón es espectacular, combinando arcos góticos con columnas vanguardistas. La cena estuvo muy bien, con anécdotas que debéis ver en el video…, buen vino, buenos cocteles… y un poco «piripis» nos fuimos a dormir para una nueva escapada al día siguiente…
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¡Hasta la próxima semana!
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