¡Hola disfrutones!
En este post-video visitamos el CASTILLO-PALACIO DE CHENONCEAU, en el VALLE DEL LOIRA.
Como sabéis, estamos haciendo un road-trip por buena parte de Francia. Encontraréis posts nuestros sobre la Costa Atlántica (País Vasco-Francés, Arcachon…), Poitiers, y todos los castillos del Loira.
Concretamente este post lo dedicamos única y exclusivamente al Castillo de Chenonceau. Dicen que es el monumento en manos privadas más visitado de Francia. Ojito…
Mira que nosotros hemos visitado todos los castillos del Loira, y os podemos decir que éste es el más especial, UNICO y DIFERENTE de todos los demás.
Para empezar, esta en medio de un río. Sí, como si fuera un puente… o mejor dicho, como si encima de un puente hubieran construido un castillo. El río Cher pasa por debajo y le da un toque precioso. Si vais a primera hora de la mañana o a última de la tarde, veréis reflejado en el río el castillo, ¡preparad la cámara!
El río Cher sirvió de frontera natural en la Segunda Guerra Mundial. Al norte estaba la Francia Nazi y al sur la Francia «libre». Hay muchas historias sobre la Resistencia Francesa pasando espías, perseguidos, militares e incluso familias enteras judías, de un lado a otro.
A este castillo le llaman el Castillo de las Damas, ya que hubo varias mujeres que tuvieron una importancia alta en la vida del mismo.
Esto se empieza a ver nada más entrar. A la izquierda, el jardín de Diana de Poitiers. A la derecha, el jardín de Catalina de Medici. A cual más bonito, eso sí.
Jardines de Chenonceau 
Jardines de Chenonceau 
Flores en Chenonceau 
Jardines de Chenonceau 
Jardines de Chenonceau 
Jardines de Chenonceau
Antes de entrar veréis el pozo y la torre de los Marques. Los Marques fue la familia que construyó el actual castillo de Chenonceau. El marido era ministro de finanzas con Francisco I y su mujer fue la encargada de demoler el antiguo castillo medieval y construir uno nuevo al estilo renacentista veneciano. Por lo menos mantuvo la antigua torre…
Dedicad un buen rato a disfrutar de cada habitación del palacio de Chenonceau, son una pasada. A nosotros nos gustó mucho la de Diana de Poitiers. Sandra os contará en el video que Diana fue la favorita del rey Enrique II y la que se lió cuando luego se casó con Catalina de Medici…
La galería que une una orilla del río con la otra es espectacular. Fue la galería de baile donde Catalina organizaba sus fiestas y fastos… está muy muy bien conservado y tiene ahora una exposición sobre la vida de otra de las mujeres más importantes que ha tenido este castillo: Louise Dupin. Fue una aristócrata durante el Siglo de las Luces y solía organizar eventos literarios y culturales en el palacio de Chenonceau. ¡Por aquí pasaron poetas, filósofos y pensadores de la altura de Voltaire y Rousseau!
Después de casi dos horas disfrutando de cada estancia del palacio de Chenonceau, por fin salimos de nuevo a los jardines. Pero ahí no había acabado la visita, quedaba un edificio a la salida llamado «La galería de los Dommes». Ahí está la Farmacia de la Reina, el Hospital Militar y la Cava.
La cava, bueno… las hemos visto mejores… La farmacia es preciosa, en madera, con utensilios de los años 20, interesante… El Hospital Militar sí tiene mucho que ver. Ahí conoceréis a otra gran mujer relacionada con el Castillo de Chenonceau, Simone Menier. Fue jefa de enfermeras en el hospital de campaña que se montó en el castillo durante la Primera Guerra Mundial y asistió a miles de soldados. Más tarde, en la Segunda Guerra Mundial, perteneció a la Resistencia francesa y ayudó a muchas familias judías a pasar a la zona liberada a través de la galería del palacio. ¡Definitivamente este castillo es muy women power!
Llegando a la salida del castillo tenéis el «potageur des fleurs», un jardín lleno de flores de diferentes tipos y colores. ¿Sabéis que en sus buenos tiempos, el castillo de Chenonceau tenía más de 400 jarrones? ¡imaginaos la cantidad de flores que necesitaban!
Vimos también una Menina de bronce, ni idea qué hacía ahí… nos recordó al post que escribimos cuando estuvimos en Ferrol y el proyecto de arte urbano de Canido y sus Meninas…
Lo dicho, Chenonceau es un MUST si estáis pensando en ir a ver los castillos del Valle del Loira. Por su belleza, por su historia… ¡nos encantó!
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