Madrid

La Hiruela: qué ver en este paraíso verde de Madrid

12 julio, 2020

4 minutos de lectura

¡Hola disfrutones!

En este post-video os enseñamos LA HIRUELA, uno de los pueblos más bonitos de la Comunidad de Madrid.

La Hiruela es un pueblecito muy cuco a menos de una hora de Madrid por la carretera de Burgos, N-1. Tiene unos 70 habitantes, que bajan a 40 durante el invierno pero que se llena durante los fines de semana, sobre todo en primavera y otoño.

Antes de hablar de La Hiruela, dediquemos un párrafo a Montejo de la Sierra. Está a 10 minutos por la misma carretera, y merece la pena por dos cosas: el hayedo de Montejo y la pastelería Nani.

Sobre el Hayedo de Montejo os hablaremos más adelante, es una excursión de la que queremos hacer un post-video temático. Importante, antes de ir, reservad, ya que tiene plazas limitadas. Nos han dicho que es una maravilla de la naturaleza. Nosotros tuvimos mala suerte, ya que teníamos reservado para ir en Marzo 2019, cayó una nevada impresionante días antes y cerraron la carretera. Por cierto, mal que no avisaran a los que habíamos reservado, fue una pérdida de tiempo ir para nada. Ahí lo dejamos.

La pastelería Nani es un clásico de la zona. La dueña es simpatiquísima y tiene unos bollitos, llamados «cojonudos» que están impresionantes. No os extrañéis si os los da a probar tirándooslos vía «perfecta parábola», es la costumbre… y también id preparados para comprar madalenas, empanadas… un pecado de sitio…

Por fin llegamos a La Hiruela. Ojo, madrugar si queréis aparcar en el parking de la entrada; no podréis entrar al pueblo con vuestro vehículo, es todo peatonal y solo pueden acceder los vecinos. ¡Qué delicia este detalle, por cierto!

Si vais tarde, os tocará dejar el coche en «el arcén» de la carretera…

Nada más entrar, lo primero que veréis es una fuente muy fotogénica y un peral más todavía. Es el abuelo de la villa, muy viejecito pero precioso, altísimo y con muchas hojas.

Iréis maravillados por la calle principal viendo todas las casitas de piedra, con sus tejados de teja roja, sus puertas de madera antigua… ¡preciosa la arquitectura serrana de La Hiruela!

La calle termina en la plaza, como debe ser. Y allí, como también es costumbre, la iglesia y el bar. La iglesia de San Miguel presume de tener bonitos frescos medievales y una pila bautismal muy antigua, aunque cuando fuimos nosotros estaba cerrada.

También estaba cerrado el Museo Etnológico. Por lo visto es una casa antigua con decoración del siglo XVII-XIX con aperos de labranza y donde se muestra cómo se vivía en esa época en un pueblo de esta región.

casa La hiruela — Arquitectura serrana en La Hiruela

La Hiruela es un pueblo ideal para ir con niños. El museo etnológico les encantará, y luego podéis hacer una de las varias rutas de senderismo que parten del mismo pueblo.

Nosotros hicimos la ruta de los oficios, está genial. Menos de 3 kms y un buen ratito de contacto con la Sierra del Rincón, que por cierto, es Reserva de la Biosfera por la Unesco. Además en esta ruta hay paradas donde te explican oficios de principios de siglo XX, muy didáctico.

Ya veréis en el video, pero las paradas son: un colmenar de hace 300 años, un molino harinero que todavía funciona y una carbonera.

carbonera en la hiruela — Carbonera en La Hiruela

En la zona del molino hay una zona de picnic y descanso. Además del cesped y los árboles, el río Jarama refresca el ambiente. Muy agradable.

La ruta es circular, con lo que acabamos donde empezamos, en la plaza de San Miguel. Tomamos una cervecita en la agradable terraza del bar y nos fuimos a comer a otro pueblo cerquita: Pedrezuela.

¿Por qué allí? porque es un sitio al que tenemos mucho cariño. Muchos recuerdos de comidas con amigos y donde además nos tratan de maravilla, el Mesón Gerardo.

Aunque tienen una carta muy completa, su especialidad es el cabrito asado. Lo hacen riquísimo, la verdad. Pero ojo con los entrantes… la oreja, las croquetas… ¡además tiene terraza para el veranito!